Miles de personas han presenciado este jueves en las calles de Sevilla el desfile final del II congreso nacional de bandas de música procesional, en el que han participado setenta agrupaciones de toda España.
Las bandas han recorrido las calles del centro de Sevilla entre la Alameda de Hércules, la Plaza Nueva y la Plaza de la Encarnación, donde se habían colocado 4.500 sillas cuya utilización se concedía a todos los que previamente hubiesen depositado un donativo o un juguete en la Fundación Padre Leonardo, creada en recuerdo del capellán de la cárcel de Sevilla.
La totalidad de las sillas fueron ocupadas, pero además miles de sevillanos aprovecharon la jornada soleada y de apertura de comercios para llenar totalmente las calles del centro y presenciar el colorido desfile, en el que las bandas interpretaron tanto composiciones de Semana Santa como canciones modernas.
Frente al Ayuntamiento de Sevilla se colocó un estrado donde vieron pasar el desfile el alcalde Juan Ignacio Zoido y el líder de la oposición, Juan Espadas.
El congreso comenzó el 1 de diciembre y durante el mismo las bandas ofrecieron conciertos en distintos puntos de Sevilla, en la sala Joaquín Turina, en la Capilla de los Marineros o en la parroquia de San Bernardo.
El desfile de bandas fue abierto por la Banda Municipal de Sevilla y, entre otras, intervinieron La Asunción de Navarra, La Sangre y Alhama de Murcia, La Caída de El Escorial, Humilladero de Azuaga, El Cautivo de Talavera, la banda de Viveiro (Lugo) y la deSan Sebastián de Tomares.
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