Colofón multitudinario. El XXIV Encuentro Nacional de Cofradías y el XVIII Encuentro Provincial de Cofradías, que ha acogido desde el pasado viernes Crevillent, finalizó ayer con la representación del Abrazo de Viernes Santo, que congregó a miles de personas en la Plaza de la Constitución. Los asistentes al evento también participaron en el Rosario de la Aurora y en la misa que ofició el obispo Rafael Palmero.
El día de ayer pasará a formar parte de la historia de Crevillent como la jornada de octubre en la que los pasos de la Semana Santa reunieron a miles de personas en la Plaza de la Constitución. La última jornada del XXIV Encuentro Nacional de Cofradías y del XVIII Encuentro Provincial de Cofradías transportó a la localidad a una de sus jornadas más singulares y memorables de la Semana Santa local, la del Viernes Santo.
Las cuatro cofradías que escenifican el popular Abrazo de La Morquera cuando aparecen por la localidad los primeros rayos de sol del día en el que murió Jesucristo, volvieron a reunirse, esta vez en la Plaza de la Constitución, para ante la atenta mirada de los cofrades de toda España que han asistido al encuentro, la de multitud de visitantes y, por supuesto, la de los crevillentinos, mostrar a la más alta representación de la Semana Santa española cómo se siente y se vive esta celebración en Crevillent.
La imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno llegó a la plaza desde la calle Blasco Ibáñez, mientras que la Santa Mujer Verónica, San Juan y la Virgen de los Dolores bajaron desde la plaza del Ayuntamiento. Estas tres últimas imágenes se fueron encontrando con la primera, la del Nazareno, en el centro de la "plaza del paseo" crevillentina. La primera, la Verónica, limpió el rostro de Jesús, cuya faz se quedó impregnada en el pañuelo de la mujer, representada por la acuarela del hijo adoptivo de Crevillent Julio Quesada. La segunda imagen en acercarse hasta el paso del Nazareno fue San Juan, que como hace durante los tres abrazos que se llevan a cabo el Viernes Santo, advirtió a Jesús de la inminente llegada de su madre, la Dolorosa. Con esta en el centro de la plaza se llegó al punto culminante del encuentro, cuando el brazo articulado del Nazareno se abrió, ante un público expectante, para abrazar a la Virgen de los Dolores.
Sin embargo, este no fue el primer acto de la jornada del domingo. Los cofrades de toda España tuvieron la oportunidad de participar por la mañana en el Rosario de la Aurora que recorre las calles del casco antiguo cantando los gozos a María. Después, se celebró la misa del encuentro, que estuvo oficiada por el obispo de la diócesis Orihuela-Alicante, Rafael Palmero Ramos.
Al acabar el oficio religioso, durante el que se hizo una ofrenda a la Patrona de Crevillent, la Virgen del Rosario, los cofrades se trasladaron hasta la sede de Cooperativa Eléctrica "San Francisco de Asís", donde se llevó a cabo la votación para escoger la sede del próximo encuentro nacional. Las ciudades de Murcia y Burgos fueron las que presentaron sus candidaturas, y, finalmente, Burgos resultó ser la escogida por la mayoría para albergar el vigésimo quinto encuentro nacional. Más tarde, durante la comida con la que se clausuró la cita nacional y provincial, se declaró a Elche como la sede del próximo Encuentro Provincial de Cofradías, que se celebrará en noviembre de 2012.
Además, ayer fue el último día de la Feria Cofrade que ha sido un auténtico escaparate con representantes de todos los sectores que trabajan para la Semana Santa. Una cita que ha servido, y mucho, a los cofrades que han participado en el evento, y agradado al resto de visitantes que ha podido ver a artistas trabajar en directo.
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