Páginas

domingo, 21 de agosto de 2011

Viacrucis de la JMJ Madrid. Preparación de una procesión Histórica (XXXVI)



Apoteosis cofrade en la Madrugá de Madrid

 Ninguno de los que hemos tenido la suerte de participar en la JMJ vamos a olvidar estos intensos días de convivencia, calor y momentos únicos que han quedado en nuestra retina.
Todo comenzaba la tarde del jueves con la visita a los pasos que participaban en el Vía Crucis al día siguiente. Aunque en la mañana ya se había realizado el retranqueo, un movimiento detectado en la corona de la Virgen obligó a realizar otro sobre las 21:00 horas, un retranqueo único que convirtió a la Iglesia del Carmen en un hervidero de personas que no querían perderse el momento.
José García Monge y su equipo comenzaban los movimientos, primero a pulso aliviado, después la primera “levantá”, lo que produjo un intenso aplauso que se repitió en cada una de las posteriores. Llantos emociones contenidas y Sevilla que cada vez más se hacía presente en el barrio de Los Austrias madrileño

La Madrugá
Madrid se convirtió por dos días en un tiempo de Semana Santa que sólo las altas temperaturas nos hacían recordar que era agosto y no marzo. Todo comenzaba a las 22:30 horas con la salida multitudinaria del Cristo de Mena y que seguiría con el Beso de Judas una hora más tarde, Titulares que se encontraron ya muy cerca de Cibeles y que, frente a frente, se hicieron los correspondientes saludos. La siguiente salida nos proporcionaba un respiro para cenar y dirigirnos hacia la Colegiata de San Isidro, donde los cuatro pasos allí instalados comenzaban el recorrido hacia el Vía Crucis en una noche con sabor a Viernes Santo.
 
El paso por la Puerta del Sol se convirtió en el más molesto para el cortejo, pues el resto de los “indignados”, no más de cinco, increparon en algunos momentos a los participantes con insultos, pero la intervención policial evito que aquello fuera a más.
Al Gran Poder de Madrid, Caído de Úbeda, Misericordia de Jerez y Despojado de Granada, se le unieron el Nazareno de León y el Yacente de Segovia, para culminar el cortejo la Virgen de Regla (La Soledad de la Virgen como titularon la estación) que sobre las seis de la mañana y con previo intento de sabojaje por cuatro indignados que obligo de nuevo a la intervención policial, comenzaba su particular procesión en rosario de la aurora, con la participación del coro de la Hermandad y una representación con estandarte de la Hermandad de los Gitanos de Madrid.
Fueron dos horas de traslado que culminaban ya sobre las 07:45 horas alba con la llegada del palio a su lugar frente al escenario del antiguo edificio de correos y hoy convertido en Ayuntamiento y con el resto de participantes ya en el Paseo de Recoletos y la Salve que puso punto y final al traslado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario